Ya estamos en Marzo y, poco a poco, vamos cambiando la nieve blanca por la blanca flor del almendro. Marzo era el primer mes del calendario de Rómulo (fundador y primer rey de Roma); debe su nombre al antiguo dios de la guerra, Marte, y en él tiene lugar el equinoccio de primavera.
Marzo es considerado un mes ventoso, un mes en el que resurge la fuerza de la vida y el ímpetu de esa primavera que la sangre altera y también un mes de lucha y reivindicación. Poco puedo decir que no se haya dicho ya sobre el 8 de Marzo, día internacional de la mujer, fecha en la que se recuerda la muerte de trabajadoras que perecieron mientras reivindicaban reducciones de la jornada laboral ¡a 10 horas! y tiempo para amamantar a sus bebés...
El hecho es que en general, todos pensamos que el mundo ha avanzado y que parece que estamos mejor que antaño... hasta que te chocas con ciertos "sucesos" a lo largo y ancho de este pequeño mundo como la mutilación genital, los matrimonios concertados, la violencia de género, la discriminación en el trabajo, el despido de mujeres embarazadas, políticos europeos justificando razones por las que las mujeres deberían cobrar menos y muchas de estas cosas tan cerca de nosotros que el bofetón de realidad te hace dudar de si lo anecdótico o excepcional sigue siendo todavía un mal enraizado y enquistado en nuestra moderna sociedad.
¿Y por qué me dará a mí por poner estas cosas en un blog sobre música? Volviendo a la Antigüedad, de la que a veces parecemos no haber salido, la palabra música procede del término griego musas, que en la mitología eran nueve hermanas que inspiraban la creatividad para las ciencias y las artes, entre ellas, como no, el arte de la música. La música es una palabra de género femenino que me retrotrae en primer término a la voz de mi madre cantando nanas o canciones infantiles, las pocas que puedo recordar de mi primera infancia, y las que le escuché cantar para entretener a mi hermana pequeña y sobre todo a sus nietos. A veces me pregunto qué clase de niñez han podido tener esos que se tienen por "hombres" cuando hablan abierta y despectivamente sobre la mujer. ¿No salieron del vientre de su madre? ¿Acaso no fueron arropados, amamantados o protegidos? Algunos parecen haber salido de un huevo enterrado bajo la arena...
A los que tenemos madre, hermanas, sobrinas, etc... no nos gusta que nadie chulee a las mujeres... ¿y a ti...?
Sobre "lucha" y sobre "no rendirse" hablo en otra entrada de este blog, "¿Te vas a rendir?" donde pongo el acento sobre la importancia de la palabra, y también de la palabra cantada para generar una actitud determinada. Me encanta la música, como a estas alturas ya habrás podido deducir, y respeto a todas las personas que componen y que se suben a un escenario... Pero me preocupan un poco las letras de algunas canciones en las que el varón aparece un poco bastante como el macho alfa o el gallito del corral y en el que la mujer queda reducida a un objeto. Cada uno es libre de bailar como y con la música que quiera. Está claro que dentro de todos los géneros hay cantantes y canciones más elegantes que otras. Solamente quería dejar caer que lo que tal vez para una persona madura puede ser un momento de simple diversión o hasta de carcajada, para personas más jóvenes, puede ser el origen o el empuje hacia la aceptación de un triste papel que nada tiene que ver con ser toda una mujer. Quiero decir, por obvio que parezca, que para mí, hasta el día hoy, una chica no es una cosa, ni un animal, es una persona... Pero no voy a prestarle más atención a lo que para mí no merece la pena. Una canción con sonido urbano y actual que reivindica un potente mensaje de respeto para la mujer es... Lo malo...
Yo no soy el más experto ni el que más sabe de feminismo, igualdad de género, machismo, virtudes masculinas o femeninas. Creo que la valentía, el afán de superación, el esfuerzo, el amor, la comprensión, el respeto... son ante todo virtudes humanas, que no hacen a nadie menos hombre o menos mujer y que están al alcance de tod@s. El mes pasado, la entrada de mi blog se llamaba "Carta de Amor" y en ella tocaba el tema del amor y del respeto.
En este mes me gustaría de algún modo escribir una carta, en primer lugar, para mi querida mamá, a la que, con el paso de los años, más de lo que me atrevo a reconocer, voy entendiendo un poco más cuando, a pesar de ciertas dosis de nerviosismo y negatividad, me intenta aconsejar y proteger desde un corazón que nunca deja ni dejará de quererme. También me gustaría que esta particular carta fuera un homenaje para mis luchadoras hermanas, que tanto admiro y tanto me enseñan; a mis amigas, profesoras, compañeras de trabajo y en definitiva a todas las mujeres maravillosas con las que he coincidido en la vida y por todas las que hacen de este mundo un lugar más bello, interesante, inteligente y apasionante.
En este mes me gustaría de algún modo escribir una carta, en primer lugar, para mi querida mamá, a la que, con el paso de los años, más de lo que me atrevo a reconocer, voy entendiendo un poco más cuando, a pesar de ciertas dosis de nerviosismo y negatividad, me intenta aconsejar y proteger desde un corazón que nunca deja ni dejará de quererme. También me gustaría que esta particular carta fuera un homenaje para mis luchadoras hermanas, que tanto admiro y tanto me enseñan; a mis amigas, profesoras, compañeras de trabajo y en definitiva a todas las mujeres maravillosas con las que he coincidido en la vida y por todas las que hacen de este mundo un lugar más bello, interesante, inteligente y apasionante.
Existen vocalistas e intérpretes femeninas increíbles. Como canciones con nombre de mujer. Con algunas de ellas termino mi homenaje para todas vosotras, mujeres de este mundo. ¡Nunca dejéis de cantarle a la vida, nunca dejéis de romper vuestro silencio y de alzar vuestra voz!
Verónica (Christian Castro)
Salir corriendo (Amaral) Noelia (Nino Bravo)
Verónica (Christian Castro)
Salir corriendo (Amaral) Noelia (Nino Bravo)
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