Nunca
antes en mi vida me habían preguntado en tantas ocasiones por mi salud, ni me
habían medido tantas veces la temperatura ni me habían hecho, claro está,
pruebas de detección de virus para poder continuar trabajando. En medio de
tanta alarma, nos damos cuenta de lo afortunados que somos mientras estamos
sanos; esa frase tan manida de "éramos ricos y no lo sabíamos" resume
muy bien los deseos y añoranzas de tiempos pasados en los que la salud y la
libertad eran tesoros que quizá pasaban demasiado desapercibidos.
La
salud se asocia rápidamente al ámbito de lo físico, aunque también es un estado
de bienestar psíquico y social. Cuerpo-mente-ambiente son áreas de nuestra vida
que están relacionadas entre sí, cuando una de ellas mejora afecta al bienestar
de las otras; cuando la mente, el cuerpo, o el ambiente empeora también acaban
apareciendo daños colaterales en el resto de estas áreas que están tan
inter-conectadas. Y es que "hay veces que sin saberlo... con tristeza
enfermamos el cuerpo..." como dice el comienzo de la letra de una de mis
canciones. Está claro que la palabra salud va mucho más allá de la salud
física, abarca también un nivel importante de bienestar emocional y social.
Aunque no todas las enfermedades tienen su único origen en nuestro estado de
ánimo, parece bastante asumido por la opinión general, que sensaciones
permanentes de malestar como el estrés pueden favorecer la bajada de las
defensas y un mayor deterioro y envejecimiento de nuestros tejidos, debido
entre otras causas, a que las hormonas que se generan ante una situación
interpretada como peligrosa destruyen y consumen nutrientes como las vitaminas,
y si esto se prolonga en el tiempo puede llegar a ser perjudicial para nuestra
salud. También sabemos que la ansiedad, la tristeza o la ira suelen provocar
tensión y rigidez muscular, dolores, problemas gastrointestinales, etc ... Por
eso es muy importante aprovechar a tiempo las señales que el cuerpo nos manda
para fijarnos en aquello de nuestra situación y de nuestra actitud que requiere
ser mejorado y también es muy importante ver el lado bueno de las cosas, con
mensajes que nos alienten desde primera hora de la mañana, para empezar el día
con buen pié. ¿Se te ocurre algún recurso donde encontrar esos mensajes? Con
mayor o menor salud, hay un lenguaje que tu cuerpo sabrá entender, hables el
idioma que hables; yo llevo media vida buscando ese tipo de melodía... y creo
que hoy he encontrado unas cuantas, pero, ¿qué te voy a decir... que tú no
sepas?
Existen
muchas iniciativas, unas más anónimas y otras más conocidas, llevadas a cabo
por artistas que suponen una inyección de solidaridad, de ánimo y de apoyo para
personas enfermas y también para profesionales de la salud, cuya labor se ha
mostrado especialmente esencial, como siempre lo ha sido y como nunca se ha
visto, en muestras de reconocimiento público y en algún premio, aunque
seguramente para las personas que han vivido en primera persona o en primera
línea de batalla la lucha contra una enfermedad grave, la mejor recompensa sea,
a nivel social, la dotación de mayores medios y recursos humanos, técnicos y
materiales y, a nivel individual, el aprendizaje de buenos hábitos de
prevención, auto-cuidado y buenas prácticas; en defensa de la salud de todos y
respetuosas con el trabajo y sacrificio de los profesionales que protegen y
salvan nuestras vidas, un esfuerzo que bajo ningún concepto deberíamos echar
por tierra.
En
cuanto a lo que podemos hacer a nivel personal, aparte de respetar y no poner
en peligro la salud de los demás, está por supuesto cuidar bien de nuestro
cuerpo. Ya conocerás ese proverbio milenario que usaban en la Antigüedad los
romanos y que nosotros en castellano nos decimos a nosotros mismos, sobre todo
a primeros de año: "Mente sana en cuerpo sano". Hacer ejercicio
moderado te mantiene más ágil, favorece el aumento de tu capacidad pulmonar y
resistencia al esfuerzo, a parte de ayudarte a eliminar toxinas a través del
sudor. Si te cuesta motivarte para ponerte en forma, oír canciones con ritmo
animado te puede ayudar a levantar peso, correr o al menos a caminar ligero.
Las endorfinas que genera el deporte o el baile contribuirán a despejarte
también mentalmente y ayudarte a encarar con más ánimo un examen o jornada de
trabajo. Sin ánimo de tocar temas complicados, la nutrición es un punto
importante: la buena alimentación, sin excesos de determinados tipos de
azúcares, grasas y algunas proteínas puede ayudarte a no generar sustancias que
cuando se acumulan en el cuerpo, pueden llegar a ser nocivas para el tandem
cuerpo-mente. En esto como en todo, cuanto menos procesada esté la comida que
preparas mejor... siempre que puedas usa productos de temporada y trata de
elaborar tus propias comidas para evitar en lo posible conservantes, así como
alimentos pre-cocinados que en el mejor de los casos pueden haber perdido
propiedades por el paso del tiempo o la forma de preparación. Además, los
alimentos frescos tienen más nutrientes, se saborean más y sacian antes, con lo
cual, con menos comida te llenas antes de energía y salud.
Siguiendo
con proverbios, hay quien dice que "somos lo que comemos" y también
quien dice que "somos lo que pensamos". "Piensa bien y vivirás
mejor" es una manera de simplificar el hecho demostrado de que nuestros
pensamientos afectan a nuestro modo de desenvolvernos en nuestra realidad.
Según los mensajes que nos enviamos a nosotros mismos, así generamos unas
determinadas emociones y en general actitudes con sus respuestas que se
reflejan en comportamientos diferentes según el tipo de ideas que asumimos como
filosofía de vida o que elaboramos como conclusiones derivadas de los sucesos
que vivimos. Lo que creemos afecta a nuestros sentimientos y conductas y es muy
importante que nuestro lenguaje interior sea constructivo y no al revés. Tener
pensamientos ponderados, templados, realistas ayuda bastante, mucho más que
ideas bonitas o superpositivas que si no se asientan en alguna base real
pueden hacernos volcar nuestro optimismo a la primera de cambio. Ya se sabe que
la verdad es la mejor medicina y la verdad no suele ser radical ni extremada.
La realidad, como la buena música, está llena de matices, de diferentes sonidos
y timbres que si se aceptan pueden llegar a componer una buen armonía, al igual
que una buena pieza interpretada por una orquesta, una buena receta culinaria
que combine bien lo dulce y lo amargo o una buena pintura con sus colores, sus
luces y sus sombras. Saber contar las cosas buenas que hay en tu vida,
aceptando las carencias pero sin exagerar ni dramatizar puede ayudarte a
disfrutar sencillamente de una serena alegría y cierta sensación de paz,
fundamental para mantener un sistema inmunológico sano y menos alterado.
Las
circunstancias que enmarcan lo que vivimos tienen alguna influencia en lo que
pensamos y sentimos, sobre todo si nuestra mente no ha madurado lo suficiente o
si los acontecimientos estresantes son numerosos, muy intensos y se producen
muy de seguido. Es más fácil elegir como cuidamos nuestro cuerpo y nuestra
mente que sobre elementos del entorno que no siempre están bajo nuestro
control. Cuidar bien de aquellas fortalezas internas que tenemos puede
contrarrestar la parte más negativa de un posible ambiente opresivo o
enrarecido. Y buscar un cambio de ambiente también te puede ayudar a
volver a sentir con fuerza que estas llen@ de vida.
Espero
y deseo que la música ponga un pequeño granito de arena para crear una
atmósfera relajada o divertida y que el tiempo te ayude a encontrar tu momento
y tu lugar para florecer en la mejor de las circunstancias. Existen semillas
que para germinar y despertar la vida latente que hay en ellas tienen que pasar
por periodos de calor y de frío y de ese modo poder romper su cáscara. Espero
que sepas aguantar el tirón de los momentos más duros y que más tarde o más
temprano llegue para ti la primavera y descubras, si no lo has hecho ya... que
te sientes bien, sobre todo contigo mism@: con tu físico y con tu alma. Deseo
que te des cuenta de que eres una persona digna de ser amada y respetada y que
creas en el lado bueno de la vida y en las cualidades que hay dentro de ti, así
como en todo lo bueno y lindo que hay en este mundo, por lo que vale la pena
levantarse, por lo que vale la pena vivir y seguir luchando día a día, paso a
paso. Más tarde o más temprano el tiempo y tu tesón te ayudarán a hacer
realidad tus sueños para que tu particular cuento de hadas se haga realidad y
el mundo reconozca lo que vales y lo que llevas dentro. Aunque parezca
increíble, si te atreves a ceder ante lo que es mejor retirarse a tiempo pero
sin rendirte ante lo que no debes renunciar bajo ningún concepto, escuchando a
tu mente y pensando con el corazón, llegará el día en el que todo lo dulce y
todo lo amargo, los claros y los oscuros, los tonos más graves y los más altos
se armonizarán y todo cobrará sentido, todo te habrá servido de aprendizaje y
entonces tu alma bailará y cantará en pie, radiante y agradecida por todo lo
recorrido y por todo lo que queda por andar...
Y hablando de
reconocimiento y de encontrar el lugar y el momento, estoy seguro de que muchas
personas que están satisfechas con su trabajo y con su labor en la vida,
a pesar de las dificultades y contrariedades que las condiciones difíciles
conllevan y que no van buscando el aplauso, sí agradecerían al menos un respeto
al esfuerzo que unos y otros estamos intentando hacer para sacar adelante el
futuro de esta civilización en los tiempos en los que nos ha tocado vivir.
Sanitarios, personal de limpieza, servicios sociales, servicios
socio-sanitarios en residencias, centros de acogida, albergues para personas
sin hogar, vendedores de supermercados, mercados, ultramarinos..., fuerzas de
seguridad, personas mayores, abuelos y padres que han luchado y luchan para
sacar adelante a las generaciones posteriores y todas las personas que se
esfuerzan por cuidar o servir a los demás de un modo u otro no necesitan
palmas, necesitan personas que usen su cabeza y su corazón para tener
responsabilidad, usar las mascarillas, guardar la distancia y no emborracharse
hasta perder la noción de lo que está pasando a su alrededor en estos
momentos. Si bebes alcohol hasta el punto de no poder recoger los residuos que
dejas tirados, aunque volvieras a la mañana siguiente a recogerlos, lo que das
a entender es que si tu embriaguez no te permite limpiar tu botellón cuando
terminas, lo más seguro es que los vapores del alcohol y tu falta de
solidaridad tampoco te habrán permitido permanecer consciente de las medidas de
seguridad sanitaria ya por todos más que consabidas... con el peligro que eso
supone sobre todo para la salud pública, en tiempos de P A N D E M I A, por si
alguien aún no se lo cree o no se ha enterado. El contagio de esta
enfermedad puede suponer daños en el aparato respiratorio e incluso la muerte,
como se supone que todos sabemos. Pero es que además, puede dejar huella en tu
organismo por tiempo indefinido, creándote asma, hipertensión arterial,
trombos, ictus... ¿De verdad hace falta que un juez nos ordene lo que debería
nacer de nosotros y lo que es simplemente de sentido común, de amor propio y de
respeto a los demás? Esta será la mejor manera de seguir adelante, por nosotros y por los que merecen la oportunidad de un mañana mejor.
¿Te parece mal
saludar con el codo o ponerte una máscara? Estos mínimos detalles son
formas de respetar a las gente con la que coincides... ¿quién sabe? a lo mejor
alguna de las personas que prestan un servicio a los demás y que se están esforzando
por curar, cuidar, alimentar, ... a los que que forman parte de nuestra
sociedad... a lo mejor algún enfermero, profesor, educador, trabajador social,
policía o dependiente de supermercado es un familiar, amigo o conocido tuyo, y
está luchando desde su puesto para que nadie se quede tirado en esta carrera
contra la enfermedad, pero también contra la irresponsabilidad y la ignorancia.
Por todos ellos, o al menos por tus mayores, gracias a los que hoy vives y
respiras, antes de perder la noción de la realidad y de bajar la guardia,
aguanta un poco y ponte, al menos, una máscara.
Hoy, por tanto como han
dado y por todo lo que ofrecerán, quiero reconocer el esfuerzo y la entrega de
todas las personas de buena voluntad de este país y de este mundo, sin
olvidarme, ya que esta es una página de música, de los artistas, todos y cada
uno de ellos. Mi agradecimiento a todos los músicos que nos entretienen y
motivan y también a las personas que, respetando los derechos de autor,
crean hermosas historias combinando escenas y melodías para conmover e inspirar
a través del arte. A mí me gusta apoyar mis palabras con canciones y vídeos
relacionados con los temas sobre los que me gusta pensar y con los que me
encanta emocionarme. En un día como hoy, en el que quiero poner en valor
la salud, como estado físico pero también como bienestar emocional
y satisfacción personal, me parece muy interesante mostraros este breve pero
significativo vídeo del canal de youtube de ErisLeFay, detrás del que hay una
generosa persona que ofrece una mezcla de la ilusión, el amor, el mito y la fantasía
de las películas junto con hermosas canciones. A veces, por un tiempo, algunas
personas se parecen un poco a la cenicienta, bajo cuya sucia vestimenta
había una persona llena de dignidad. Te recomiendo que no pierdas de vista este
canal y que lo apoyes suscribiéndote con tan solo un click o pulsando tu
pantalla desde youtube.
Lo sepa el mundo o no, conocid@ o desconocid@ tú siempre serás ALGUIEN, un ser lleno de vida y vida humana. Mientras tanto, cuídate muchísimo y no dejes de cantarle cada día al gran regalo de la vida.
Evaristo ÐGabriel
No hay comentarios:
Publicar un comentario